Después de 56 días de la tragedia en la Línea 12, que dejó 26 personas fallecidas y más de 90 lesionadas, Florencia Serranía Soto dejó de ser la directora general del Sistema de Transporte Colectivo Metro (STC); en su lugar quedó Guillermo Calderón, quien hasta ayer era director del Sistema de Transportes Eléctricos (STE) de la Ciudad de México.
“El día de hoy queremos agradecerle todo su empeño y trabajo a la doctora Florencia Serranía, directora del Metro de la Ciudad de México, del Sistema de Transporte Colectivo, este esfuerzo y empeño que ha puesto en el Metro de la Ciudad de México”, fueron las únicas palabras que dijo la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, al confirmar la decisión que surgió como rumor desde la semana pasada.
Sin tomar el micrófono para decir una sola palabra, a diferencia de su sucesor, Serranía Soto escuchó el anuncio de pie, con las manos al frente, entrelazadas, vestida de rojo y zapatillas del mismo tono, lejos del pantalón de mezclilla, las botas y el chaleco del Metro con el que se dejó ver el pasado 4 de mayo, el último día que participó en una videoconferencia, a pocas horas de la tragedia.
Sheinbaum Pardo no permitió preguntas ni respuestas de la prensa, por lo que quedó en el aire el saber si Serranía renunció o si la mandataria local la destituyó del cargo después de las incontables veces que la defendió, pese a las múltiples fallas que tuvo el Metro durante los 2.7 años en los que estuvo a su cargo.