Algo han dejado evidentes los movimientos del Canciller Marcelo Ebrard en Querétaro, y es que Morena se reduce a un pequeño grupo de actores políticos, ex militantes de otros partidos políticos, quienes son los más cercanos al aspirante a la Presidencia de la República.
Los dos más cercanos son, hasta ahora, Santiago Nieto y Juan José Jiménez Yáñez. El primero actualmente Fiscal del Estado de Hidalgo y el segundo Diputado Local y Coordinador de la bancada de Morena en la Legislatura del Estado de Querétaro.
Coincidencias hoy hay muchas. Ambos se dividen el control y operación de la estructura más visible de Ebrard en el estado: Diálogos Progresistas, Jiménez como Coordinador de este grupo plural, como lo llaman, y Nieto con la representación nada más y nada menos que de Juan Carlos Espinosa Larracoechea, su mano derecha y Jorge Lomelí, operador político que se ha encargado de planchar la agenda de Nieto desde su aspiración en el ya lejano 2020 y quien ya trabajó en algún momento en el PRD con Marcelo Ebrard.
La agenda de la gira de Ebrard en el estado incluyó una reunión privada en el hotel Domun, en la que se reunió con los liderazgos locales del partido y operadores políticos de los mismos, entre quienes se encontraban los ya mencionados.