Dos hijos de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), Gonzalo Alfonso López Beltrán y Andrés Manuel López Beltrán, salieron a defenderse de distintas acusaciones de corrupción y presunta influencia en contratos que ha dado el actual gobierno; prácticamente de todas se desmarcan, con la excepción de su participación en la supervisión del Tren Maya, aunque aclaran que fue sin sueldo.

Los hijos de AMLO publicaron una carta en la que refutan una a una las “calumnias” y “mentiras”, que consideran se han hecho en su contra para dañar la “credibilidad y fuerza moral” del presidente López Obrador.

Incluso, señalaron que el “acoso y persecución política” contra su padre “se extendió a nosotros“.

“Durante estos años decidimos resistir la embestida guardando silencio y dejando que nuestro padre respondiera las calumnias y mentiras que nuestros adversarios han esgrimido continuamente en nuestra contra con el fin de usarnos para debilitar su credibilidad y fuerza moral”, indicaron los hijos de AMLO.

“Sin embargo, todo tiene un límite. Creemos que la bajeza ha reinado en los últimos tiempos y se ha convertido en estrategia política. Esto no puede tolerarse“, advirtieron.

Los dos aseguraron que “ninguno de nosotros se dedica a la política o trabaja en el gobierno. No obstante, la oposición decidió romper todos los códigos éticos. Emprendieron una campaña de espionaje, mentira, difamación y ataque en contra de nuestra familia. Violaron nuestro derecho a la privacidad, a tener un trabajo y una vida tranquila alejada de la confrontación política”.

Incluso, afirmaron que “somos la primera familia de un Presidente del México moderno que no recibe apoyo económico del presupuesto de la Presidencia de la República, que no recurre a la extinta ‘partida secreta’ y al disuelto Estado Mayor Presidencial. Conscientemente decidimos ser la primera familia presidencial que trabaja para lograr su sustento, tal como lo hace la gran mayoría del pueblo de México. Nos sumamos al principio de que el gobierno debe ser austero y sin dispendios”.

Los hijos de AMLO señalaron que “ninguna de las calumnias y acusaciones en nuestra contra ha sido acompañada de pruebas que las sustenten. Todas las aseveraciones han estado basadas en supuestos, dichos de terceros, espionaje a terceros, conjeturas, redacción tendenciosa y editorialización de la ‘información’ con lo que han tratado de involucrarnos en fantasiosas historias que pretenden dañar nuestra imagen pública y honorabilidad”.

Sobre el presunto favoritismo para otorgar el contrato de la obra del Malecón de Villahermosa a una persona cercana a ellos, los hijos responden: “Nunca hemos recomendado a ninguna persona o empresa para la obtención de contratos de obra pública en dicho proyecto ni en ninguno otro. Además, debe aclararse que ni Alejandro Castro ni ninguna empresa de su propiedad tienen contratos con el gobierno o ejecutaron ningún contrato de obra pública en dicho proyecto”.

Además, defienden que la obra “se encuentra terminada al 100 por ciento desde su inauguración, el día 2 de febrero de 2024, y que las imágenes que de forma inmoral y tendenciosa utilizaron en sus reportajes se trataban de fotografías tomadas previamente el 23 de abril del 2023, es decir, 10 meses antes de la inauguración de la obra“.

Respecto a la acusación de una “red de corrupción política con la finalidad de beneficiar con contratos y presupuesto público del INSABI, de gobiernos estatales y de Pemex a la empresa Romedic SA de CV y a su propietario (Jorge Amílcar Olán Aparicio)”, responden también que no han intercedido por esa persona y que “no estamos involucrados en la administración pública a ningún nivel de gobierno y mucho menos tenemos influencia o injerencia alguna en las decisiones que dichos gobiernos deciden tomar con relación a licitaciones, adquisiciones, contratos, compras, proveedores, etcétera”.

“Rechazamos categóricamente la manera en la cual se ha tratado de insinuar que recibimos dinero o que operamos una red de corrupción política con miras a favorecer a dicha empresa. Nunca hemos recibido dinero de dicha empresa, y no tenemos relación alguna con ella”, atajaron.

En cuanto a su relación con un amigo de Andy que compró un terreno en las cercanías de la refinería de Dos Bocas a un precio menor del valor comercial y su posterior arrendamiento, los hijos de AMLO refieren que “la adquisición de dicho terreno no puede ser más ajena a nosotros”.

“No somos propietarios de dicho terreno, no tuvimos que ver con la operación de ninguna manera y no tenemos testaferros o presta nombres como insinúa la nota”, afirman.

Sobre la relación de Gonzalo con el supuesto otorgamiento para su explotación de una mina de balastro en Oaxaca y la compra-venta de balastro para las obras del Tren Maya, aclaran: “Negamos categóricamente haber intervenido para beneficiar a algún grupo empresarial en las obras del gobierno, incluyendo la colocación de balastro en las vías del Tren Maya”.

“El balastro es una parte fundamental en la obra del Tren Maya y, como tal, es responsabilidad única y exclusiva de los consorcios que lo construyen: ellos deciden a quién comprarlo, cómo instrumentar dicha logística, los precios a los que lo compran y, sobre todo, ellos son los responsables de la calidad del balastro que adquieren y colocan en la obra”, afirman.

“Sobre el supuesto otorgamiento de concesiones mineras para la explotación del material en Oaxaca que se menciona en los ‘reportajes’: es más que público que durante este sexenio el Gobierno de México a cargo de nuestro padre, no sólo no se ha entregado ninguna concesión minera, sino que se ha reducido el número y el territorio entregado en administraciones anteriores para dichos fines”, anotan.

Eso sí, reconocen que hace más de un año, “debido a la preocupación de nuestro padre por avanzar lo más rápido posible en las obras que deberían de quedar concluidas antes del cierre del sexenio, le pidió a los encargados del proyecto del Tren Interoceánico recibir a Gonzalo en calidad de ‘Asesor Honorífico‘, para que él pudiera estar supervisando los avances que se tienen e informarle de forma periódica para ahorrarle la necesidad de acudir a la zona de forma mucho más frecuente y poder dedicar dicho tiempo a otras labores que lo ameritan”.

Pero sostienen que “nunca recibió un salario por dicha aportación ni tampoco estaba dentro de las atribuciones o encargos intervenir en las decisiones o estrategia de las constructoras, simplemente se trataba de observar el avance en el tiempo y reportar de posibles atrasos o problemas en la obra para poder resolver los contratiempos eficazmente y terminar el proyecto en tiempo y forma”.

Y en cuanto a una vinculación con el narcotráfico, los hijos de AMLO manifiestan su “desaprobación, consternación, extrañamiento y coraje ante esta cobarde e irresponsable calumnia“.

“Mencionar y relacionar con el narcotráfico y la delincuencia organizada a cualquier persona en un artículo periodístico en un medio de comunicación no debería ser un asunto tomado a la ligera. Los daños causados a la reputación, honorabilidad y seguridad de las personas debería estar siempre presente en la decisión de publicar un ‘reportaje’ de este tipo. Está claro que en este caso no fue así y que se actuó con dolo, irresponsabilidad y cobardía.

“Empezamos afirmando de manera contundente que jamás hemos tenido ninguna relación con la delincuencia organizada, jamás hemos sostenido encuentros, reuniones o hemos tenido relación alguna con ningún líder o integrante de organizaciones delictivas.

“La mención misma es ridícula, al afirmar que: ‘una tercera fuente que sugería que los cárteles del narcotráfico tenían videos de los hijos del presidente recibiendo lo que se describió como dinero del narco, según consta en los documentos’. Si hacemos un análisis detenido de la redacción de esta afirmación tanto en su versión en inglés como en español llama la atención que en ambas versiones todo está escrito en un genérico plural, que no aporta información concreta alguna.

“Las preguntas obligadas a los ‘periodistas’ serían: ¿Alguno de ustedes vio o tiene en su poder alguno de estos vídeos? ¿Vieron o tienen en su poder documentos ‘oficiales’ que prueben la existencia de dichos materiales?”, preguntaron.

 

-Con información de La Lista