La agencia Moody’s señaló este miércoles que revisará la calificación de México (Baa2, estable) con la entrada de la futura presidenta, Claudia Sheinbaum, y que se centrará en el alto déficit y plan fiscal, así como las reformas que pueda aprobar la mayoría alcanzada por el oficialismo en el Congreso y la agenda para Petróleos Mexicanos (Pemex).

“Aunque nuestro monitoreo del perfil crediticio del gobierno es continuo, creemos sobre todo que con el cambio de gobierno será necesario revisar este escenario base que tenemos para la calificación de México”, dijo en conferencia de prensa Renzo Merino, analista de Moody´s para el país.

El analista anticipó que la próxima administración dé a conocer los detalles en los próximos meses y destacó que esperan los primeros esbozos de su política fiscal y financiera en los precriterios del presupuesto 2025, a publicarse en octubre próximo, una vez que asuma Claudia Sheinbaum como la primera presidenta de México.

También mencionó un interés por “saber cuál es el plan para Pemex”, pues señaló que han incorporado a la petrolera estatal en el balance de las finanzas públicas del gobierno.

“Será importante para nosotros entender cuál es el impacto final (de Pemex) sobre la hoja de balance del gobierno y las métricas de deuda”, mencionó.

Así mismo, Merino dijo que si bien los mercados reaccionaron de manera positiva a que Rogelio Ramírez de la O permanezca durante la transición y por tiempo indefinido en el próximo gobierno de Sheinbaum; aún es requisito conocer el ajuste fiscal que harán al déficit de 5% respecto del producto interno bruto (PIB), el más alto en tres décadas.

“Más allá del anuncio de que Rogelio Ramírez de la O se quedará en el puesto en la próxima administración, esperamos conocer más detalles sobre el proceso o programa de ajuste fiscal”, sostuvo.

Por su parte, el analista de Moody’s también señaló que el impacto de posibles reformas en el Congreso darán una mejor perspectiva hacia el cuarto trimestre del año para evaluar su calificación, en caso de que se concreten las mayorías de dos terceras partes del oficialismo en el Congreso que les permitirían reformar la Constitución y cualquier ley sin negociar con la oposición.

En este sentido, mencionó que vigilarán la evolución de los contrapesos en el país, con reformas pendientes que buscan que jueces se elijan con el voto popular, la desaparición de órganos autónomos, así como el control que tendrá Sheinbaum en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) por su recomposición desde diciembre de 2024.

“Hacia el cuarto trimestre de este año estaríamos en una posición de tener más información para evaluar el nivel y, en última instancia, la perspectiva que tenemos del soberano, recordando que la calificación actual del gobierno es ‘Baa2’, dos peldaños dentro del grado de inversión, con perspectiva estable”, dijo.

 

 

-Con información LATINUS