• Staff Frecuencia 

Lo que todos veíamos venir se hizo realidad. Y es que la nueva Ley General en materia de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación (LGHCTI), que sustituirá a la actual Ley de Ciencia y Tecnología, fue aprobada en madruguete legislativo por parte de los senadores de Morena.

En Querétaro apenas hace unos días, el senador morenista Gilberto Herrera acudió a un foro organizado por la Universidad Autónoma de Querétaro, para hablar respecto a la herramienta que guiará la política científica del país los próximos años.

Ahí se reunieron diputados de distintas bancadas, senadores, académicos e investigadores.

Llegado el momento, se le pidió al senador Gilberto Herrera tomar la palabra para defender la iniciativa promovida por el Jefe del Ejecutivo y líder de Morena Andrés Manuel López Obrador, ante el descontento de diversos sectores de la sociedad.

Herrera Ruiz mencionó que se organizarían foros legislativos para discutir más a fondo el tema, cuestión que no sucedió.

Por su parte el diputado federal del PRI, Rubén Moreira Valdez y el Dr. Mauricio Flores Moreno, del Centro de Investigaciones en Óptica, se fueron a la yugular por este proyecto de iniciativa; mientras que Gilberto Herrera sostuvo que el recorte al presupuesto era viable, pues en México hay mucha investigación de «curiosidades» y no de proyectos que beneficien a la sociedad.

En tanto a la hora de la discusión en el Senado de la República, el legislador morenista se les «perdió» durante la sesión, en la que más tarde se aprobó esta reforma a la Ley de Ciencia y Tecnología.

La Senadora presidenta de la Mesa Directiva, Verónica Noemí Camino Farjat, lo llamó por el micrófono para hacerse presente, pero Herrera no apareció.

Más tarde, de madrugada, se supo que la bancada de Morena, PT y PVEM lograron el quórum para aprobar dicha ley y dar el albazo legislativo, sin los senadores de oposición que tenían tomadas las instalaciones de la Cámara de Senadores.

Por un lado, su discurso político es en ‘favor de la ciencia, la educación y la tecnología’, pero por otro, Herrera Ruiz demuestra que es uno más del autoritarismo de nuestro país.